En Chicago, los sucesos tomaron un sesgo violento, ante la dura represión policial que culminó con la masacre de la plaza Haymarket, y el posterior y amañado juicio contra un grupo de dirigentes anarquistas y socialistas de esa ciudad, cuatro de los cuales fueron ahorcados.
Fue esta una larga lucha que duró décadas y cuya historia los gobiernos burgueses buscan constantemente que sea olvidada y lavada de todo contenido político social, hasta el punto de pretender transformar dicha fecha en un día festivo más.
Ya desde su primera etapa, el gobierno peronista trató de darle el carácter de “fiesta del trabajo”.
Creó a tal fin un himno, en el cual su primera estrofa comenzaba: “Hoy es la fiesta del trabajo / unidos por
el amor de Dios…”, además del hecho ya conocido de haber reemplazado en los estatutos de la CGT el concepto fundamental de lucha de clases por el de armonía de clases.
Para los compañeros y las organizaciones que seguimos creyendo en la necesidad de construcción de una nueva sociedad, más justa, más igualitaria, más solidaria, socialista, el 1· de Mayo no es un día de fiesta, es un día de lucha y en avance hacia la independencia política e ideológica de la Clase Obrera.
Argentina, con un gobierno encubierto con un ropaje “progresista”, no es ajena a esta grave situación social, con mantenimiento de altos niveles de pobreza y marginalidad y un 40% de trabajo “en negro”, bajos salarios y más de un 70% de jubilados cobrando la limosna de $1200.- mensuales. La inefable Cristina vetó la ley del 82% móvil, al mismo tiempo que prioriza el pago de la ilegal y fraudulenta deuda externa.
Todos estos magros ingresos son a la vez constantemente deteriorados por la creciente inflación, que es en realidad un robo paulatino a los salarios de los trabajadores. Todo esto contando siempre con la complicidad de la burocracia sindical empresarial, traicionando como es habitual, los intereses de los laburantes.
Hoy más que nunca, a más de un siglo de aquella abnegada e histórica jornada de lucha, y en momentos de alza de los conflictos obreros y demás sectores populares, continuaremos en la irrenunciable contienda por una vida digna para todos y por la unidad de los trabajadores y todos los oprimidos y explotados, en el camino ininterrumpidode la liberación nacional y social de nuestra patria y la “Patria Grande” indoamericana.
Es también nuestro deseo, y nuestra humilde colaboración, el impulsar la realización el 1· de Mayo de un acto unitario, con la mayor participación popular posible, en base a un acuerdo de puntos mínimos, que sea a la vez una evidente contrapartida y manifestación de repudio al acto oficial organizado por la burocracia sindical empresarial.
EXIGIMOS AL GOBIERNO LA APARICION CON VIDA DE JULIO LOPEZ Y LUCIANO ARRUGA.